Quien quiera salvar su vida, la perderá; pero el que
pierda la vida por causa mía, la salvará (Lc 9,24)
Lógica paradójica
ese es el reino de Cristo.
No es el camino que siguen
los que son sabios del mundo.
Fueron hechos principales
quienes últimos se hicieron.
Aquí no hay peor servidor
que el que quiso ser primero.
Esta lógica del reino
por la fe solo se alcanza,
es locura para unos,
necedad para los otros.
Quien su vida ganar quiera
por Cristo ha de perderla,
porque aquel que se la guarde
nunca más habrá de verla.
¡Qué lógica insensata!
los sabios del mundo alegan,
prefieren cómodas puertas,
un abismo los seduce.
Como el trigo hay que morir,
que se entierra y da su fruto,
ay de aquel que así no muera
porque solo va a morirse.
Lógica paradójica
ese es el reino de Cristo,
porque en renglones torcidos
nuestro Dios derecho escribe.
ese es el reino de Cristo.
No es el camino que siguen
los que son sabios del mundo.
Fueron hechos principales
quienes últimos se hicieron.
Aquí no hay peor servidor
que el que quiso ser primero.
Esta lógica del reino
por la fe solo se alcanza,
es locura para unos,
necedad para los otros.
Quien su vida ganar quiera
por Cristo ha de perderla,
porque aquel que se la guarde
nunca más habrá de verla.
¡Qué lógica insensata!
los sabios del mundo alegan,
prefieren cómodas puertas,
un abismo los seduce.
Como el trigo hay que morir,
que se entierra y da su fruto,
ay de aquel que así no muera
porque solo va a morirse.
Lógica paradójica
ese es el reino de Cristo,
porque en renglones torcidos
nuestro Dios derecho escribe.